EL BOTE VACÍO
La verdadera felicidad consiste en no ser nadie
y en dejarse llevar por el sino
Osho, el gran filósofo de la India, es otro de los personajes a quien
admiro. Trataré de interpretar su pensamiento en los siguientes términos. Si
quieres ser una persona importante, ambicionas bienes materiales, deseas
distinguirte del ignorante, torcer tu destino o forjarte un futuro próspero:
estás condenado, irremediablemente, a sufrir. En cambio, cuando tú no
ambicionas nada y te dejas llevar por el destino, entonces eres una persona
perfecta, libre y absolutamente feliz. La persona humana es infeliz en la
tierra porque tiene su mente (que desea ser dominante o dominada) que configura
su ego, su yo, el ser alguien.
Así, la sociedad humana, es enemiga de las personas porque condenan al
sufrimiento, pues en la casa, en la escuela, en la universidad, en la calle, en
el club nos “enseña” a ser alguien, a afianzar nuestras mentes, a ser
discriminantes y el que se esfuerza en ser alguien superior a los otros, en ser
ganadores para dejar a los otros como perdedores es, inexorablemente,
desgraciado pues ese camino está empedrado de desgracias, penas, egoísmos,
iras, envidias, odios.
No ser nada ni nadie significa no tener ego, no tener sufrimientos,
rabias, rencores; no ser nada ni nadie significa no tener el yo, no tener
angustias, desolaciones, infortunios, triunfos, fiascos. En suma, no ser nada
ni nadie significa no echar a andar la mente, significa botar todo; significa
estar vacío, y en tal condición la persona llega a ser una nada, a ser
perfecta, a ser absolutamente feliz. Así la persona se convierte en un bote
vacío; y, adquiere totalidad. Así, ella se convierte en santa. Acepta todo; y
de buena gana, suceda lo que suceda. En ella no hay desventura, no hay aflicción,
no hay desdicha.
Así, Osho desarrolla la teoría metafórica del Bote
vacío (invito a
leerlo). Imagínate un bote vacío, va a la deriva conforme el destino traza su
camino. Osho dice: “Yo no voy a ayudarte a convertirte en alguien. Yo no soy tu
enemigo. Sólo puedo ayudarte a ser un donnadie, sólo puedo empujarte al
abismo...sin fondo.. simplemente te disolverás y la felicidad será permanente,
eterna, por y para siempre. Buda alcanzó esto.. Buda dijo: la vida es
aflicción, el nacimiento es aflicción, la muerte es aflicción, todo es
desdicha. Y era desdicha porque el ego estaba ahí. El bote no estaba vacío”.
Así es que no andemos por la vida construyendo nuestra propia
infelicidad, cebando la fogata de nuestro propio infierno. Tratemos ser un bote
vacío, arrojemos del bote las tristezas, los rencores, los odios, las
venganzas, las envidias, las ambiciones; lancemos del bote los deseos, las
preocupaciones por el mañana, las pretensiones de cambiar nuestro destino;
dejemos vacío nuestro bote, dejando nuestras mentes vacías (relajadas a través
de la meditación). Osho dice: “La luz está por doquier y tú vives en la
oscuridad, la muerte no está en ninguna parte y te estás muriendo continuamente;
la vida es una bendición y tú estás en el infierno”. Es que el bote no está
vacío, ahí está –impenetrable- el ego, el yo. La oveja y un árbol, por citar
ejemplos, son perfectos botes vacíos. Nietzsche envidiaba la felicidad de la
oveja, felicidad que las personas, pese a ser superiores, no tenían. Ni la
oveja ni el árbol están preocupados por su mañana, no están lamentándose de sus
existencias; simplemente están ahí, llevados por su sino.
Osho es un iluminado. Es un donnadie. Es un bote vacío. Es totalidad. Es
esencia. Es santo. Es célibe (pero de verdad). Es inconmensurable. Osho nunca
nació, nunca murió; solamente visitó el planeta Tierra entre el 11 de diciembre
de 1931 y el 19 de enero de 1990. Amén.
Ingrese a la siguiente Página Web:
http://nemesioespinoza.com/
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